Raquel Soto Escandón
El pasado sábado me encontré con algunos compañeros que venían el curso pasado a este centro. Se les veía muy contentos. Les pregunté por lo que hacían. Unos carrera en la universidad y otros módulos, pero todos estaban felices con lo que estaban estudiando, ya que era lo que ellos habían elegido. Me preguntaron que qué tal por el instituto, y les dije que con ganas de que lleguen las vacaciones, porque estamos muy estresados con los exámenes. Ellos se echaban a reír diciéndome que se acordaban de eso y que todo cambia mucho cuando te vas del instituto porque entonces eres más independiente. La verdad es que te hace ilusión volver a ver a esta gente con la que hemos compartido recreos, risas en los pasillos y algún que otro día de fiesta. También me encontré con algún que otro "gamberrete" que decidió abandonar los estudios. Estos últimos me dicen que aproveche y que ponga toda la carne en el asador. Vi en sus caras arrepentimiento por no haber seguido estudiando. La conclusión está clara: Ánimo y a tirar hacia delante.
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