martes, 31 de mayo de 2011

Agresiones a la Historia

Carlos Rodríguez Mayo
La biografía de Franco, de Luis Suárez Fernández, vuelve a situar en los medios de comunicación el problema de la manipulación de la Historia. Don Luis Suarez es un medievalista que fue Director General de Universidades en vida del dictador. Creo recordar, incluso, que lo fue con el ministro Don Cruz Martínez Esteruelas, que cerró la Universidad de Valladolid de febrero a junio. Es un historiador de la llamada historia de acontecimientos que tiene a su favor el haber estado en el origen de la formación de los mejores medievalistas de la generación posterior. Fueron alumnos suyos: Don Julio Valdeón, recientemente fallecido, y al autor del tomo de medieval de la Historia de España de Alfaguara, el iniciador del departamento de medieval de la Universidad de Cantabria: Don José Ángel García de Cortázar. 
Pues bien, al parecer, en la citada biografía de Franco, el anciano historiador, Don Luis Suárez, afirma que aquel régimen en el que él alcanzó alguna relevancia política, no fue totalitario, sino más bien autoritario. Según el diccionario un régimen totalitario es el que tiene partido único y persigue cualquier pensamiento político "distinto", el régimen sin libertad que produce presos políticos. Si se aplica este concepto, a mi modo de ver resulta indiscutible que el régimen de Franco fue un régimen totalitario, dado que el llamado Movimiento Nacional fue el único agrupamiento político legalmente permitido. Las distintas familias franquistas (falangistas, Opus Dei, cristianodemócratas, etc) no pueden considerarse partidos políticos, ni los referendums  verdaderas elecciones.
En consecuencia, no puedo estar de acuerdo con Don Luis y lamento infinito no estarlo, porque la historia es una ciencia que persigue la verdad y debería ser capaz de no forzar los conceptos que utiliza. Desconozco las razones o los argumentos de Suárez, pero no le creo capaz de convencerme de que es justo rebajar el totalitarismo de Franco a simple autoritarismo. Estoy dispuesto a aceptar que hubo un totalitarismo blando, especialmente al final, pero no a cambiar los términos. Con todo esto, los historiadores acabaremos participando del desprestigio general que sufren los políticos, por ser capaces de decir una cosa y la contraria, incapaces, por lo tanto, de fijar y de dar lustre a la verdad.

domingo, 29 de mayo de 2011

Otra vez, la última semana

Carlos Rodríguez Mayo
El 17 de junio del año pasado, publicaba en este blog un artículo que titulaba: “la última semana”, en el que criticaba el mal que supone la irracional decisión de todas las autonomías gobernadas por el PSOE de realizar los exámenes extraordinarios, pensados para el mes de septiembre, durante el mes de junio. Una decisión tan equivocada como ésta ha producido durante años efectos muy negativos. Intentaré explicarlos de forma clara y objetiva:
1º-Durante esta última semana es obligatoria la asistencia de todos los alumnos a clase, también de los aprobados, pero estos ya han sido evaluados en la evaluación ordinaria final, previa a la extraordinaria. De manera que, para estos, esa última semana queda fuera de su evaluación. Es decir, que, aunque el alumno no haya recibido aún sus notas, sabe que no se va a examinar de lo que a partir de ese momento explique el profesor y que su comportamiento ya no influye en su nota, porque ya ha sido evaluado.
2º-Según la teoría, la prioridad durante esta semana la tienen los alumnos evaluados negativamente en la tercera evaluación, aquellos a los que se concede la posibilidad de realizar una nueva, tan sólo una semana después (y no tres meses después). Sin embargo, el profesor se pregunta: Si en las cuarenta semanas anteriores no se ha conseguido llevar al alumno a alcanzar las competencias y los contenidos mínimos programados, ¿qué nuevas circunstancias se pueden sumar por parte del alumno, tan sólo una semana después para justificar que se cambie la evaluación de todo el curso?
A mi modo de ver, resultan evidentes las consecuencias negativas del planteamiento irracional de esta última semana. La principal es la de la comprensible abundancia de faltas de asistencia no justificadas, lo que exhibe de forma impúdica la alarmante insuficiencia del sistema disciplinario de los centros, que acaban el curso mirando para otro lado, es decir, haciendo caso omiso de la norma que hace obligatoria la asistencia de los alumnos al horario lectivo. De este modo, esta última semana se convierte en un caos descontrolado en el que se exhibe el fracaso del sistema, antes de las vacaciones de verano.
Esperamos de la nueva Consejería de Educación, que la mayoría del Partido Popular está a punto de constituir, que tome la decisión de volver a trasladar la Evaluación Extraordinaria al territorio temporal para el que fue creada, es decir, el mes de septiembre. Una solución alternativa sería la de suprimir esta evaluación, a la vista de su inutilidad, puesto que la inmensa mayor parte de los alumnos no recupera sus materias y, puesto que una parte significativa de los aprobados en ella se consiguen sin mejora en el saber y la competencia del alumno, por una indeseable flexibilización en los criterios de evaluación de los profesores.
Ambas posibles soluciones se han planteado de forma múltiple durante los últimos años, sin que la Consejera socialista hiciese el más mínimo movimiento en la buena dirección.

jueves, 26 de mayo de 2011

Mi despedida

Carlos Rodríguez Mayo
Se nos ha echado el fin de curso encima y apenas he tenido tiempo de despedirme de vosotros, los nueve alumnos de este blog. Lo hago ahora, aunque sé que la suerte ya está echada y que la ruleta de la fortuna seguirá girando y no dejará de crear distancia entre nosotros. En el futuro, os recordaré de muy diversas formas. Recordaré vuestros artículos más genuinos, aquellos en los que afloraron vuestro ingenio o vuestra sensibilidad, recordaré las dificultades padecidas para sacar adelante los trabajos de investigación o para exponer los resultados, recordaré vuestras miradas interesadas en entender el contenido de mis propuestas, los debates internos cuando tocábamos puntos en los que discrepábamos, vuestro comportamiento siempre respetuoso y, sobre todo, esa sonrisa y esos ojos luminosos, ese aura de vida que da la juventud y que es una auténtica bendición para los profesores carrozas, como yo. 
Si nuestra relación ha sido fructífera, es posible que hayáis aprendido a valorar la realidad que os acompaña cada día y a expresarla por escrito sin tener miedo a las consecuencias, porque es mejor decir que callar y porque hablando o escribiendo se aclaran las ideas y uno se compromete con lo que pasa. Si mi trabajo ha alcanzado algún éxito, habréis adquirido la confianza que hace falta para defender vuestra posición y habréis crecido un poco. Yo no sé en qué medida se habrán logrado estos objetivos, pero sí que sé que, por mi parte, vuestras palabras, vuestros trabajos y vuestras sugerencias me han servido para ver y entender mejor muchos problemas o al menos para plantear y dejar en suspenso interrogantes que algún día habrá que resolver. Me despido, por lo tanto, agradeciéndoos vuestra colaboración impagable desde este lugar que hemos inventado con nuestro esfuerzo, desde este blog del Ría del Carmen que tanto nos ha costado mantener y que tan pocos aplausos merece. El mundo es así de injusto. La calidad de nuestro producto nunca será reconocida si no da votos, si no es amable con la dirección o con el poder establecido. No importa. Nuestro único premio son los lectores que hemos conquistado con paciencia y el intentar y conseguir abrir las puertas de nuestros corazones. El mío siempre estará abierto para todos vosotros. Seguid siendo buena gente.

lunes, 23 de mayo de 2011

Artículo de despedida

Raquel Soto Escandón
Estaba en mi cuarto pensativa y me he decidido a escribir este artículo de despedida:
Me parece que fue ayer cuando empecé. En este centro he pasado seis años de mi vida. En él he vivido momentos buenos y malos, en él he llorado y he reído, he conocido nuevos lugares, he hecho buenos amigos y también he conocido el amor. Estamos a tres días de finalizar el curso y aún no me lo creo, aunque lo cierto es que ya estaba deseando terminar, ya que este último curso ha sido bastante duro y no ha habido un buen ambiente en la clase. Pero agradezco la oportunidad de haber podido expresarme en este blog, aunque desearía que lo leyera más gente. Así se enterarían, de verdad, de las cosas que pasan en el centro. 
En la nueva etapa que nos espera, les deseo a mis compañeros lo mejor y también a los profesores. Hasta siempre.

sábado, 21 de mayo de 2011

Más que un profesor

Maria Cruz Santamaría y Ana V. Quevedo 
Orientador, psicólogo, profesor, experto en saber escuchar, en ayudarte siempre que esté en su mano, en aconsejarte lo adecuado y, además y sobre todo: Una gran persona. Creo que todos sabéis de quién hablamos... Nos gustaría aprovechar la ocasión de que llega a su fin nuestro paso por este instituto para darle las gracias por las largas charlas en su despacho sobre qué hacer con nuestras vidas, por sus consejos, por todo lo que nos ha ayudado. Fue nuestro profesor de psicología el año pasado y este curso, más que un profesor, ha sido un apoyo para muchos de nosotros. Por todo esto, te damos las gracias, Emilio.

viernes, 20 de mayo de 2011

En la Plaza Porticada

Carlos Rodríguez Mayo
Hay una alumna en el centro que ha decidido conocer directamente el movimiento de los indignados y se ha ido a acampar a la Porticada. Sin decirme que esa era su intención, me preguntó antes de incorporarse a la movida por mi opinión al respecto. Yo, para responderle, le dije lo siguiente:
Nuestra democracia es aún muy joven y perfectible. Comprendo y apoyo las legítimas quejas de los jóvenes, que están siendo los verdaderos paganos de la crisis, y también sus ansias de mejorar la democracia con una reforma de la ley electoral, con listas abiertas, y con un nuevo reparto de las circunscripciones electorales, para intentar sacar el poder del comité ejecutivo de los partidos y para conseguir que el voto a PP y PSOE no quede tan favorecido como lo está en la actualidad por la aritmética electoral. También me parecen asumibles algunas peticiones de carácter social como las relativas a las ayudas a la vivienda para los jóvenes.
En sentido contrario, le dije, la tentación totalitaria se cuela con facilidad entre los que intentan dirigir este tipo de movimientos asamblearios. Eso lo conozco bien de cuando estudiaba en la universidad en el ocaso del franquismo. Pues bien, hay que estar alerta ante los que transforman un movimiento pacífico en violento a base de desafiar la ley, que en un país democrático es la manifestación escrita del acuerdo y el consenso social. El que no respeta las leyes o el que las fabrica de modo que se impida este consenso no es un verdadero demócrata. Tampoco lo es el gobierno que las desafía o no hace que se cumplan. Por aquí nos queda aún un largo camino, pero que nadie se olvide de que la base del sistema está en el voto porque el voto es la consecuencia necesaria e insustituible de la soberanía popular. Además no se debe olvidar que la ley electoral nos dice que, después de la campaña, el día de antes de las elecciones es un día de reflexión, de manera que los que no respeten este día (mañana sábado) y el sagrado rito de las elecciones no harán sino demostrar su talante autoritario o totalitario, porque estarán  agrediendo al principio que dicen defender: la democracia.

jueves, 19 de mayo de 2011

Un respeto, Señor Director

Carlos Rodríguez Mayo
Escribir en una revista que se dirige a alumnos y profesores de un instituto supone pensar la realidad diaria con ese carácter crítico que se persigue en una buena educación democrática y expresarlo después sin excesos y con tino. Eso han intentado los alumnos de este blog y algunos lo han conseguido. Este es el caso de Ana V. Quevedo. Ella escribió en el mes de abril un artículo relativo al cierre de los baños en el que contaba su comportamiento contrario a una decisión que creía equivocada. Lo hizo, como se puede consultar, con corrección y moderación, a pesar del enfado que cualquiera sentiría cuando acaba de sentirse privado de un servicio tan básico como es el que motivó el artículo citado.
Pues bien, este artículo ha provocado un efecto inesperado. El Señor Director, aprovechando que la autora de este artículo se dirigía a él para un asunto, le ha acusado ante testigos de faltarle al respeto. Ella, sorprendida, replicó al señor Director que el blog estaba abierto a su réplica, y él respondió que en ningún caso escribiría en este medio, al que acusó de utilizar el nombre del Ría del Carmen.
Cerrar casi todos los baños del instituto a los alumnos es una decisión muy discutible que estoy seguro que no recibiría el apoyo mayoritario ni de los alumnos ni de los profesores, aunque el hecho estuviese precedido por un encadenamiento de faltas graves. Confundir la crítica legítima con una falta de respeto supone ir más allá del presunto error cometido, porque da a entender que se carece de la flexibilidad intelectual necesaria para comprender que hay otros que con todo derecho opinan de manera diferente y que la libertad de expresión, que utiliza hechos veraces y bien fundamentados y que no ataca al derecho al honor de las personas aludidas, merece un comportamiento más tolerante por parte de la dirección.
Estos son los hechos, tal y como me los han contado. El escrito de Ana V pueden consultarlo aquí. Juzguen ustedes.    

Estudiar o no estudiar

Diego Bolado Palencia
Durante los meses de este curso, tengo que reconocerlo, he estudiado mas bien poco. Solo he estudiado el día antes de tener cada examen. Por eso mis notas no van a ser buenas. Ahora que llegan los exámenes finales, tengo que estudiar lo que no he estudiado antes y ya hay materias que tendré que aprobar en septiembre. Por lo tanto considero que este año lo he “tirado” por la ventana, no lo he aprovechado bien. Así que tendré que perder gran parte del verano preparando los exámenes de recuperación de las asignaturas que me queden para septiembre. Si volviese a empezar este año me plantearía muy bien cómo hacer las cosas. Por eso quiero decir a los alumnos que empiezan bachiller que, antes de comenzar el curso, se planteen con claridad sus objetivos, que piensen en lo que realmente quieren hacer.

martes, 17 de mayo de 2011

Esfuerzo final

Elena Fernández Marcos
Agobio, estrés, cansancio, sueño, enfado, rabia, miedo... Cada día, en cada hora de estudio, en cada examen, es imposible no sentirse identificado con alguno de estos estados de ánimo, si estás en 2º de bachillerato. A estas alturas del curso, cuando los días de clase se cuentan con los dedos de una mano y los exámenes se amontonan, sientes que todo lo que haces no es suficiente, hay momentos de colapso en los que las cosas no te entran en la cabeza, momentos malos en los que piensas si merece la pena seguir, pero continuamos, no hay que rendirse porque el largo camino llega a su fin. No hay tiempo para dar un paso en falso. Todo tiene que estar calculado al milímetro para no tropezar o para levantarse tan rápido como sea posible e incorporarse a la carrera. Venga, corre sin parar. No te distraigas. Ya estás llegando. Al fondo se ve la meta...

Prácticas de Química

Elsa Ajo Navarro
El pasado jueves hemos realizado una práctica de Química los alumnos de ciencias de 2º de bachiller. Se trata de una de las prácticas propuestas para selectividad. Este experimento, tal y como dijo Teresa Negro, era el último que ella realizaba en el instituto, ya que se jubila este año. Como siempre, Teresa consiguió hacer interesante el ejercicio, con su sonrisa y su conocida ilusión por la Química. Realizamos varias prácticas, todas relacionadas con el tema que estamos dando ahora, Redox: Reacciones reducción-oxidación. Algunas salieron bien, mientras que otras se resistían. Aún así, Teresa continuaba intentando dominarlas para que saliesen a la perfección.
De las clases con Teresa que he tenido en estos dos últimos años, las más divertidas han sido, sin duda, estas clases prácticas. En ellas Teresa ha conseguido despertar en nosotros un interés por la Química que antes no teníamos y además nos ha enseñado muchas cosas que seguro que nos serán útiles en el futuro. Gracias Teresa por transmitirnos tu entusiasmo y tu saber.

domingo, 15 de mayo de 2011

Al final de nuestro último curso

Cristina Romillo Barquín
El otro día, mientras pensaba sobre qué hacer el último artículo, me vinieron a la cabeza, como si estuviera en un cine, las caras de todos los compañeros que he tenido a lo largo de mi estancia en el instituto. Muchas de esas caras están casi borradas y tienen forma de niños, pues no las he vuelto a ver, sin embargo la mayor parte me son más conocidas y tienen mi edad actual, a pesar de que en principio tan sólo eran chicos que se sentaban en las mesas de alrededor. Hoy en día, esas caras cambiadas son las de mis amigos, porque si algo he aprendido en estos años ha sido a ser paciente con las personas y conocerlas antes de juzgarlas, porque te puedes llevar muchas sorpresas y la persona a la que criticas puede acabar siendo un gran amigo (al menos en teoría).
Ahora que estamos en el último curso es posible que no volvamos a ver a nuestros compañeros, ya que, debido a sus estudios, unos se dispersarán por distintos puntos de España, y otros trabajarán o se quedarán aquí, pero lo más seguro es que los alumnos que se llevan bien conservarán su amistad.
También los profesores han sido importantes. Nos han enseñando no sólo la lección, sino también a ser personas, porque, aunque nos haga gracia que un profesor nos dé consejos y nos parezca pesado, es posible que a lo largo de nuestra vida sus mensajes nos sean útiles. Me llevo los recuerdos de aquellos profesores con los que me llevé bien y me gustó su forma de impartir la clase y los de aquellos que me lo hicieron pasar mal, ya sea por nuestra falta de compatibilidad o por ser demasiado exigentes para sacar lo mejor de mi. De lo que no me olvidaré jamas es de haber pertenecido al grupo de teatro del instituto. Por todo eso y mucho más, gracias.

sábado, 14 de mayo de 2011

El buen y el mal bilingüismo

Carlos Rodríguez Mayo
Me espanta la dimensión que va tomando el bilingüismo en la campaña electoral. El PSOE y el PP se pelean por llevar la antorcha. Si uno propone una cifra el otro partido promete más y mucho más rápido. Parece que no hay quien pare la expansión de la palabra que da votos, la palabra que oculta el engaño de la degradación de todo el sistema educativo de nuestro país: Bilingüismo.
Pues bien, el bilingüismo actual en la España de idioma castellano (en Cataluña, Pais Vasco y Galicia es otra cosa) consiste en un torpe intento de utilizar el conocimiento de algún idioma extranjero por el profesorado para impartir su asignatura en ese idioma. Se supone que de esta manera los alumnos aprenden más inglés (la lengua que se pretende potenciar), aunque nunca nadie evaluó si esto es verdad. Nuestro bilingüismo, además, lleva aparejadas una serie de consecuencias negativas. Son las siguientes:
-La discriminación entre los alumnos. En efecto, la elección que realizan los alumnos crea dos tipos de grupos. Los grupos bilingües con alumnos competentes y motivados y los grupos no bilingües, caracterizados por lo contrario. Los grupos no bilingües se suelen convertir en un ghetto en el que es muy difícil trabajar. De manera que a los alumnos motivados no les queda más remedio que elegir el grupo bilingüe, si no quieren verse sometidos a cursos indisciplinados y con dinámicas muy negativas.
-El nivel disciplinar en las asignaturas impartidas en inglés se reduce como consecuencia de la falta de dominio en el idioma por parte de los alumnos o del profesor bilingüe.
-El enfrentamiento entre profesorado bilingüe y no bilingüe, como resultado de las peores condiciones de trabajo que sufren los profesores no bilingües en los centros.
El bilingüismo no es malo. Podría ser muy bueno, pero para conseguirlo tendría que ser verdaderamente bilingüe, con un profesorado realmente bilingüe (que no se garantiza con el sistema de acreditación actual) y con un alumnado bilingüe, que habría que crear por la base (mejor en preescolar, que en infantil) y no a los 12 años. Además, para que no hubiese discriminación entre los alumnos, TODOS ellos (y no sólo los que lo elijan) deberían cursar enseñanza bilingüe en las asignaturas que se determinen (deberían ser la mayor parte), y si no es así, para que no hubiese discriminación entre los profesores, urgiría equilibrar las condiciones de trabajo atribuyendo al profesorado bilingüe los grupos no bilingües que se originasen. Por último, para que no hubiese discriminación entre asignaturas, todas ellas, salvo los propios idiomas, deberían poder ser bilingües (no entiendo por qué se excluyen en Madrid las Matemáticas) y el inglés, como materia, debería practicarse en un horario más extenso.
Este buen bilingüismo habría que construirlo poco a poco, creando centros bilingües en primaria e infantil que incluyesen después la ESO y el Bachillerato bilingüe en las capitales de provincia y ciudades grandes. Habría también que crear cuerpos de profesores bilingües en cada una de las asignaturas y exigir niveles de dominio del inglés a los alumnos, en los distintos ciclos de enseñanza.
Nuestro mal bilingüismo, sin embargo, se improvisa. Sin alumnos ni profesores bilingües, provoca discriminación y pérdidas notables en los aprendizajes de todas las materias. Además se olvida de que tenemos un idioma, el castellano, y de que es importante que lo valoremos y que lo cultivemos. Nuestro bilingúismo es un engaño, una chapuza más. Un producto de mercadillo que no sirve para lo que se compra, pero que hace daño al sistema. Mucho daño...
Con éste mal bilingüismo nuestros políticos nos vuelven a dar gato por liebre.

viernes, 13 de mayo de 2011

Móviles

Diego Bolado Palencia
Como dijo Carlos en un artículo anterior, tenemos que dar las gracias a los tecnólogos, ya que la tecnología forma parte de nuestro día a día. Los ejemplos más evidentes de su utilidad son los teléfonos móviles y los ordenadores. Por ejemplo, sin estos últimos no existiría este blog. 
Como también dice Cristina en otro articulo, mucha gente usa los teléfonos móviles para copiar en los exámenes, pero yo creo que no solo se los usa para eso, sino que otras veces sirven como calculadoras o como fuente de información, ya que muchos móviles nos permiten entrar en Internet para mirar cosas distintas. Por eso pienso que el problema no son los móviles sino más bien quién los usa y cómo.

miércoles, 11 de mayo de 2011

Los deberes de los profesores

Elsa Ajo Navarro
Una parte de nosotros, los alumnos, durante las vacaciones, nos hemos dedicado a estudiar para mejorar los resultados en el tercer trimestre. Otros, sin embargo, han utilizado su tiempo para el disfrute de su ocio personal.
Del mismo modo entre los profesores existen los dos tipos antes mencionados. Algunos, después de dos semanas de vacaciones, han llegado a clase con los deberes sin hacer. En efecto, antes de acabar el trimestre realizamos varios exámenes y, a la vuelta de vacaciones, algunos de ellos siguen en el mismo estado, sin haberse manchado de rojo.
Nosotros, en nuestras vacaciones, seguimos estudiando, ya que estudiar es nuestro oficio, y en cambio, muchos profesores se dedican a disfrutar y a relajarse en vez de hacer lo que deben. Esto no sería un problema si en cuanto empiezan las clases los exámemes se corrigiesen. Pero generalmente esto no es así. Los profesores suelen tardar todavía unos cuantos días más en darnos las notas, cuando ya estamos en clase. En el caso de 2º de bachiller esto produce a los alumnos un problema grave, porque nos urge conocer el resultado de nuestros ejercicios ya que necesitamos organizar nuestros estudios y saber qué asignaturas tenemos que recuperar.
Por todo esto, no quisiera quedarme con las ganas de agradecer su actitud a los profesores que corrigen pronto sus exámenes.

martes, 10 de mayo de 2011

Visita a la planta potabilizadora

Laura Cagigas y Elsa Ajo
El último día antes de Semana Santa los alumnos de Ciencias Medioambientales realizamos la única de excursión del curso. Fuimos a la potabilizadora de Camargo. Aunque en un principio ibamos a ir 13 alumnos finalmente fuimos 3, y un cuarto hizo el amago pero decidió escabullirse. Cuando llegamos allí con Marisa Navarro, estuvimos un rato buscando a alguien que nos atendiese, ya que solo veíamos otro grupo de alumnos al que un trabajador explicaba las instalaciones. Tras unos minutos, Marisa decidió ir a la aventura y terminamos incluyéndonos en el otro grupo. Ellos ya habían visto varias cosas, pero no hubo problema en que el trabajador, después, nos explicase lo que nos faltaba.
Fue una visita enriquecedora, aprendimos cómo tratan el agua y vimos las instalaciones. Todo esto nos ayudó a entender mejor el tema de la contaminación del agua.

lunes, 9 de mayo de 2011

Carta a los indecisos

Juan Torres Iturrioz
Ana M. Matute tenía razón cuando en la ceremonia del Premio Cervantes dijo “El que no inventa no vive”. Pero también la hubiera tenido si hubiera dicho “El que no intenta no vive”. Intentar: tener ánimo de hacer algo; preparar, iniciar la ejecución de algo; preparar o pretender. Así se define en el DRAE. Intentar es actuar en consecuencia con lo que uno piensa, llevar a la práctica las ambiciones y, aunque los ideales choquen con la desesperanzadora realidad material, saber que lo has intentado.
El paso de 2º de bachillerato a cualquiera de los horizontes que se te plantean es un ejercicio de elección trascendental. Hasta ese momento no has definido tanto tu futuro como haces entonces. Hasta ahora habías decidido entre fútbol o baloncesto, salir los sábados o quedarte en casa, bikini o bañador.
“Porque ser valiente no es solo cuestión de suerte”, cada uno tiene que dejar de un lado sus manías, psicosis, complejos… y echar el resto. Parecerá un fragmento de un libro de autoayuda, escrito por alguien que lo intentó y triunfó. No lo es, no es esta la intención. Lo que digo son palabras de quien lo intentó y simplemente está feliz por ello. Porque hay que atreverse, vivir. Y si no sale ¿qué? Menos la muerte todo se cura.

Preparación de exámenes finales con clase: Difícil.

Raquel Soto Escandón
Hoy, lunes 9 de mayo, nuestro tutor nos informa de que las clases no acaban el día 19, como pensábamos muchos, sino que acaban el día 25, a pesar de que los días 20,23 y 24 tenemos la última oportunidad antes de septiembre, es decir los exámenes finales.
Ya teníamos pensado nuestro plan de estudio y teníamos la esperanza de aprobar, pero ahora nos preguntamos: ¿Cuándo preparamos los exámenes si se nos exige venir a clase esos días? Todos sabemos que es complicado preparar un examen durante el año y que las cosas no siempre salen como deseamos, pero si además tienes sólo tres días por delante, toda la materia de un curso y no puedes dedicarte a fondo, sino que tienes que asistir a clase, la cosa se pone complicada...
Recuerdo que el año pasado los alumnos que estaban en nuestra situación no asistieron a clase. Este año, a pesar de los "cambios", preveo que va a pasar lo mismo.

domingo, 8 de mayo de 2011

Defender algunos valores sexistas

Carlos Rodríguez Mayo
Me acusan las feministas de que no ataco al machismo y de que no defiendo a la mujer. Y es verdad, pero es que yo no encuentro en nuestro medio, el instituto, ningún rastro relevante de machismo o de discriminación hacia la mujer (aunque sí existe un hecho estadístico evidente que es el de un mayor índice de fracaso escolar para los hombres). En todo caso, les digo a los que me atacan, el blog está abierto, ¿por qué no me lleváis la contraria? ¿Por qué no expresáis vuestros argumentos por escrito? Saldar estas cuestiones en el bar es nuestra costumbre, pero es mejor ponerlo en negro sobre blanco. Yo soy como soy, y pienso como pienso. Espero que no consideréis ésto un delito. Supongo, también, que os daréis cuenta de que presuponer que el representante de igualdad debe ser necesariamente un feminista es una muestra de sectarismo inaceptable. ¿Acaso solamente los cristianos deberían poder dar clase de religión? ¿Acaso para ser sindicalista hace falta ser marxista?
En la etiqueta "igualdad" se pueden leer artículos en los que me enfrento con la propaganda del feminismo radical para dejar muy claro que hombres y mujeres no sólo somos diferentes sino que pensamos diferente (esta es la tesis del programa redes con la neurobióloga Louann Brizendin, en rtve.es) y que la historia ha asociado valores diferentes a cada uno. Yo defiendo que hay valores masculinos (como la nobleza, por ejemplo) y valores femeninos (como la dulzura) que hay que conservar, aunque no sean exclusivos de cada sexo, porque son valores culturales positivos que aparecen entremezclados con la historia y que recibimos como herencia de nuestros padres, para que lleguen hasta nuestros hijos. Yo he educado a mis hijos de forma diferente a como lo hicieron conmigo mis padres, intentando no discriminarles, pero me satisface que el varón sea un hombre y que la chica sea una mujer, aunque los querría igual o más si hubieran sido homosexuales. Frente a los que reprimen lo que hay de masculino en los chicos y de femenino en las chicas, yo defiendo los valores positivos por sí mismos. Quiero decir que, aunque yo he enviado a mis hijos (a ambos) a clases de ballet, no me opongo a que los chicos, si quieren, vayan a aprender artes marciales. 
En la vida se puede ser progresista (favorable a los cambios) o conservador. Del mismo modo que no es malo cambiar, sobre todo si es a mejor, tampoco lo es el defender lo que hay de bueno en el pasado. Detrás de nosotros hay muchos cuentos, mucha literatura y mucha historia que hay que transmitir, aunque sea sexista, para que no se produzcan pérdidas irreparables. Pensar que estamos por encima de todo ello, porque con nosotros culmina la historia, no sólo es muestra de un orgullo desmedido, es además un error propio de la ignorancia y de la juventud. Tenemos que evolucionar, pero también tenemos que conservar el patrimonio que recibimos. Somos hijos de nuestros padres y nietos de nuestros abuelos. No quememos los libros ni los conventos.  

sábado, 7 de mayo de 2011

La ley de economía SOStenible

Carlos Rodríguez Mayo
Me llega una comunicación del Señor Director que hace referencia a unas modificaciones de la LOE y me paso todo el día leyendo en internet para intentar enterarme de qué lío es éste de la modificación de la ley de educación: ¿No habían dicho que para evitar la inestabilidad de los últimos años, tan negativa, no harían más reformas educativas hasta que no hubiera un consenso entre los dos grandes partidos? Pues no es así. Escuchen:
Nuestro gobierno, tan “original”, hace cosas como ésta: Modifica la LOE, que es la ley orgánica de educación vigente, sin el voto del PP, con una ley no orgánica (es decir de rango inferior): La ley de economía sostenible. Dicho en otros términos, se cuela una reforma educativa, sin consenso, en una ley que se discute y se refiere principalmente a otros asuntos (economía, fuentes de energía, etc), lo que exige una modificación con ley orgánica posterior (ley complementaria de 14-3-2011). Y ¿qué es lo que necesitaba el PSOE legislar de forma tan vergonzante e irregular? Pues en resumen, si no he entendido mal, lo siguiente:
1º- Reintroducir los itinerarios en 4º de la ESO de la LOCE (ley del PP), que se apresuraron a borrar los socialistas con la LOE, con lo que perecía y perece el principio sacrosanto de la LOGSE, el de la comprensividad, o enseñanza común e integradora.
2º- Permitir un más fácil acceso de los alumnos desmotivados (los que aquí hemos llamado desertores) a los programas de iniciciación profesional (lo que antes se llamaba garantía social).
3º- Flexibilizar la comunicación entre FP y Bachillerato.
4º- Intentar reducir el fracaso escolar, favoreciendo a las asignaturas instrumentales, Lengua española y Matemáticas, y al Inglés.
Para mi, el procedimiento seguido es lamentable, pero los cambios son, en general, positivos. Me perece que hay que saludar una gestión que comienza a mirar a la realidad y al correcto diagnóstico de los problemas, mientras deja en un segundo plano a los principios ideológicos (necesarios pero no exclusivos). Se diría que, por eso, el PSOE se ha vuelto atrás de sus planteamientos para coincidir con las antiguas ideas del PP. En este tiempo confuso, sin embargo, nada es verdad ni es mentira, todo es función del color del cristal con que se mira.     

jueves, 5 de mayo de 2011

Gracias, Teresa

Diego Madrazo Arce
Este año, entre los profesores que se jubilan, está nuestra profesora de Física y Química: Teresa Negro. Con ella he convivido durante tres cursos: 3º de ESO, 1º y 2º de bachillerato. Aunque al principio mi interés sobre la Física y la Química era bajo, he terminado por aprender muchas cosas. Puedo recordar ahora esas visitas al laboratorio y algunas de las prácticas realizadas. En general, todas ellas, eran bastante entretenidas. Por último quisiera recalcar que mientras he sido alumno de Teresa he aprendido y me he divertido mucho, por eso hay que darle las gracias y desearle que le vaya bien.

¿Dos recreos o sólo uno?

Laura Cagigas Acebo
No en todos los centros el horario está repartido como aquí de forma que se tengan dos recreos, cada uno con una duración de veinte minutos, sino que en algunos casos se tiene simplemente uno, a mitad de la mañana y de media hora de duración. Hay quien piensa que es mejor un sólo recreo puesto que así acabaríamos más temprano y llegaríamos antes a casa. Frente a ellos están quienes prefieren tener dos recreos para descansar un poco más entre clase y clase, para que de este modo no dé tanta pereza cambiar de asignatura y acabar saturados con tanta materia. Aunque normalmente solemos preferir lo que no tenemos, quizás porque no nos hayamos encontrado en ambas circunstancias y no conocemos todos los pros y contras, no nos queda más remedio que adaptarnos a lo que hay y sobrellevarlo lo mejor posible.

El quehacer de los tecnólogos

Carlos Rodríguez Mayo
Desde que surgió la idea de comenzar con este blog, son muchas las ocasiones en que he tenido que preguntar a Soraya o a Carlos asuntos relacionados con la informática y los ordenadores, y tengo que decir que en todos los casos se han mostrado diligentes y eficaces. Su saber es muy importante, porque sirve para que nos puedan enseñar a utilizar unos medios que vamos necesitando poco a poco, a medida que el mundo cambia a nuestro alrededor. Ellos se actualizan día a día y nos permiten usar sus conocimientos. Es propio de biennacidos, el ser agradecidos. Por lo tanto, muchas gracias.

miércoles, 4 de mayo de 2011

Salir del armario

Carlos Rodríguez Mayo
Si hay un tema tabú, todavía, en los institutos, éste es el de la homosexualidad. Aunque la sociedad ha evolucionado enormemente en lo relativo a la discriminación de este colectivo, aún nos queda un largo recorrido por delante. En efecto, no es raro en mis horas de guardia escuchar entre los alumnos de la ESO el término marica o maricón. Las dos palabras se suelen usar para insultar levemente a la persona que recibe el atributo, por lo que no se aplican necesariamente a homosexuales. Yo no soy partidario de estigmatizar a las palabras, sino al que las utiliza con ánimo de agredir a otro, por eso, casi siempre, utilizo la circunstancia para defender el derecho de cada cual a vivir su sexo libremente y para exigir respeto hacia los que salen del armario o todavía están adentro, al tiempo que acepto y remarco el sentido múltiple de ambos términos.
Si nos atenemos a las encuestas y estadísticas que sitúan el fenómeno en proporciones que oscilan entre 1 y 10% de los adultos, en el centro deberíamos haber tenido más de un profesor o alumno homosexual. Sin embargo, en toda mi experiencia docente (ya son más de treinta años) nunca he conocido a ninguno que lo haya asumido publicamente. Este hecho subraya la idea de que el asunto no se vive con normalidad, sino con una carga enorme de represión. 
A mi me parece que, si es verdad que los heterosexuales no padecemos de puertas adentro del instituto graves problemas de discriminación, no sucede lo mismo con los homosexuales. El sufrimiento que tienen que sentir los que perciben que realmente no se entiende ni se aprueba su opción sexual no es un problema baladí. El centro debería asumir la responsabilidad de dar la cara y defender la dignidad de estas personas a quienes se obliga a vivir su identidad sexual como algo vergonzoso. Se debería recordar, por ejemplo, que el Ministro de Educación que inauguró nuestro centro, Don Jerónimo Saavedra (el de la palmera canaria de la rotonda), salió del armario no hace mucho, o bien desarrollar en el aula actividades que tiendan a modificar comportamientos negativos, reivindicando la homosexualidad de grandes de la cultura como Lorca, Dalí, Leonardo o Almodóvar. La táctica del avestruz no minimiza ni destruye el problema. Hay mucho trabajo por delante. Manos a la obra.

Entrevista en la Cadena Ser



Un recuerdo ya olvidado

Cristina Romillo Barquín
Cuado llegamos al instituto, hace siete años, a los mayores se les permitía utilizar la parte de atrás. Aún los recuerdo con el cigarro en la boca, al aire libre y sin molestar a nadie. Esto ahora es impensable. Si quieres fumar, deberías salir fuera, pero como no se puede salir...
No solo era un lugar para fumadores, sino tambien un jardín con árboles y cesped en el que los alumnos podían sentarse y disfrutar con el buen tiempo, ¿a quién no le gusta tumbarse en la hierba mientras el sol calienta su cuerpo?
No recuerdo que nos dieran ninguna explicación sobre el por qué se cerró esta parte al uso público, lo único que sé es que, cuando nos vayamos este año, nadie recordará que en el instituto hubo un tiempo en el cual se podía correr por un jardín, en vez de sobre el duro asfalto.

Última actuación del grupo de teatro

Cristina Romillo Barquín
El grupo de dramatización del instituto actuará este viernes 6 a las 20:00h en Santander en el IES Villajunco en la c/Junco,8 - 39005. Representarán una obra nueva, "Los extraterrestres eran ellos", creada por Juan Manuel Freire este año, que trata sobre un extraterrestre que llega a la tierra, se encuentra con unos personajes bastante peculiares y vive situaciones cotidianas. La obra está llena de toques de humor que harán reir y disfrutar al público.
Desde aqui se os invita a ver a nuestros compañeros actuar a todos aquellos que estéis interesados.

Nuestra visita a la radio

Ana V Quevedo Rodríguez
El pasado Domingo 24, salió nuestra entrevista en la Cadena SER. Fuimos en el tren, desde Maliaño, Raquel, Elena y yo. Cuando llegamos a la radio, a la salida del Pasaje de Peña, en Santander, Carlos y Javier Menéndez ya nos estaban esperando. Nosotras, las tres, íbamos bastante nerviosas. Teníamos miedo de no saber responder a las preguntas o de quedarnos en blanco. Después de unas rápidas presentaciones, subimos en el ascensor a las instalaciones de Radio Santander. Una vez allí, conocimos a Beatriz Grijuela, la locutora que nos acompañaría en la grabación, y subimos al estudio. Mientras ella llegaba, Javier nos hizo algunas preguntas y anotó nuestros nombres. Nosotras sonreíamos, nos hacíamos señales y nos mirábamos como diciendo: ¿Dónde nos hemos metido? Finalmente llegó Beatriz. Nos advirtió que no teníamos por qué temer a los micrófonos y empezamos a grabar la entrevista. Todo fue como la seda. Comenzamos a hablar de nuestro instituto, de los profeosres, de literatura, respondiendo a sus preguntas y nos íbamos sintiendo cada vez más cómodas. Ambos, Beatriz y Javier, nos tranquilizaban porque con su actitud, tan profesional, transmitían mucha seguridad. De este modo los minutos se pasaron volando.
Al final, nos despedimos encantados y decidimos bajar a tomar un café con Carlos. En el local de la calle Jesús del Monasterio comentamos que la experiencia había sido genial y nos reímos de aquel miedo tan ridículo y de la facilidad con que se había disipado.

martes, 3 de mayo de 2011

Historia de amor entre rejas

Elena Fernández Marcos
Las historias que suceden en este instituto a diario son muchas. Yo os voy a contar una que se repite cada día: Todas las mañanas una chica se levanta para ir al instituto y va a clase con normalidad, pero cuando llega la hora del recreo, la monótona mañana cambia para ella. Suena el timbre, va a su taquilla a dejar los libros y sale al patio. Detrás de la valla que separa nuestro instituto del exterior, su novio espera impaciente su llegada. Después del saludo, hablan durante un rato de cómo marcha el día o de cualquier otra cosa sin importancia. También algunas veces discuten. De vez en cuando, si se abre la puerta, aprovechan para darse un abrazo, separados por esa línea que divide los dos mundos. Cuando toca el timbre del otro instituto, él se marcha y entonces se lanzan un beso que pasa entre los barrotes. Algunos días, sin embargo, aparece el guardián del recinto, un profesor que llega para impedir que puedan hablar durante esos pocos minutos. Entonces la chica suele discutir con él y el profesor responde elevando la voz para hacer oír sus argumentos. Mientras tanto, el chico se queda del otro lado de la valla, esperando sonriente y en silencio, hasta que ella acaba por obedecer al profesor. Entonces, el profesor y la alumna se alejan discutiendo y el muchacho se vuelve hacia sus compañeros del otro instituto, como todos los días que la historia se repite.

Exámenes finales.

Elsa Ajo Navarro
Acabamos de volver de las vacaciones de Semana Santa... Bueno, si se las puede llamar así. Han sido muchos días, en los cuales deberíamos haber descansado para poder enfrentarnos ahora al final de curso. Pero para la mayor parte de los alumnos de 2º de bachiller las vacaciones no han debido de ser relajadas. Muchos de nosotros hemos tenido que estudiar todo el tiempo para poder sacar bien este último "trimestre", que consta de menos de un mes. Hoy hemos comenzado de nuevo. La mayoría con mucho estrés. Estamos agobiados porque mañana mismo comienzan para algunos los exámenes finales. Solo quedan dos semanas para los más afortunados, para aquellos que han estudiado todo el curso y lo llevan todo aprobado. Los demás "disfrutaremos" de tres días más, los días de las recuperaciones. Aún así, con esfuerzo y perseverancia sacaremos adelante nuestros objetivos. Eso espero. Suerte para todos.

lunes, 2 de mayo de 2011

Comienza el último trimestre

Carlos Rodríguez Mayo
Comienza el último trimestre. Para muchos se trata ahora de realizar el último esfuerzo para conseguir aprobar el curso.
El aprobado es un objetivo demasiado pobre para la mayor parte de los alumnos. Conseguir el nivel mínimo está al alcance de casi todos, incluso en asignaturas como las mías, que se basan en la acumulación de información. Para la mayor parte, bastaría con ponerse las pilas y con dejarse arrastrar por la inercia de unos métodos que se vienen repitiendo en clase durante todo el curso, para alcanzar niveles de notable o de sobresaliente. Sin embargo, muchos chicos, influidos por la vagancia o el desánimo, o afectados por la presión de las asignaturas en las que no se ha llegado todavía al nivel de suficiente, se dormirán en sus laureles y verán cómo se hunden sus notas. Los que así se comporten se labrarán ellos sólos el suspenso, mientras que los que sigan luchando es probable que consigan convencer al profesor de que merecen aprobar.
Para los profesores, el objetivo principal es enseñar sus distintas materias, aportar a los alumnos la sabia de sus conocimientos y el hábito de trabajo y de disciplina necesarios. Suspender mucho no es una buena solución, sino más bien un engorroso problema y un síntoma de desagradable fracaso. Por eso, no suele resultar muy difícil convencernos de que algo está cambiando. El afán por aprender siempre se expresa con preguntas, con las dudas que el proceso va creando en cada cual. Por lo tanto, si queréis que os apruebe un profesor, seguid mi consejo, preguntadle muchas cosas y pensad en sus respuestas. Es muy fácil demostrar que se intentan conseguir los objetivos y es muy fácil mejorar.

La lengua de Dios

Carlos Rodríguez Mayo
Si Dios hizo al hombre a su imagen y semejanza, resulta lógico pensar que el idioma que habló Adán sería el mismo que el del Verbo. Muchos fueron los judíos que persiguieron acercarse a las fuentes de la palabra a través del análisis del Génesis y otros libros de la Biblia o a través del sometimiento de las letras del alfabeto a repeticiones de índole matemática, pero, la verdad, ninguno de ellos llegó tan lejos como el sefardí Iván Aví.
Para éste, la lengua original, ese idioma perfecto por divino y primigenio, fue el castellano. En efecto, según su punto de vista, expresado en 1661 en su obra: “Oro”, si la creación se hizo de la nada y por oposición de contrarios, como resultado de un equilibrio especular entre el ser y el no ser, entre el más y el menos, entre el vicio y la virtud, este primer idioma debió de tomar forma a base de palíndromos. Aví se enfrentó con los judíos de Londres, que defendían, con fundamentos teóricos parecidos a los suyos, que una mixtificación de inglés y francés habría sido el vehículo de las primeras palabras de Adán, pronunciadas al encontrarse con Eva en el paraíso. Frente al caballeroso galo-anglo-sajón: “Madam: I'm Adam”, él explicó que, mucho antes, en el mágico momento en que Dios Padre infundía vida al primer hombre, aquel ser nuevo y hablante, en el uso del divino idioma, debió de tomar la palabra y dijo: "Yo soy Adán, nada yo soy".

domingo, 1 de mayo de 2011

Desertores de los libros

Carlos Rodríguez Mayo
El mayor problema de nuestro sistema de enseñanza en los niveles de secundaria es el de los llamados “desertores”. Son éstos, alumnos que rechazan por sistema el servicio educativo a pesar de que se encuentran en niveles obligatorios. Son en su mayor parte varones y se convierten con los años en repetidores. Los profesores se sienten indefensos ante su comportamiento, porque no encuentran el camino para conseguir convencerles de que intenten aprender sus asignaturas. Lo más que se consigue, después de desarrollar un control intensivo sobre ellos, es neutralizar su tendencia a enturbiar el clima de la clase y a hacer perder el tiempo a los demás. Ellos, además de descubrir a sus compañeros que no existen mecanismos de disciplina eficaces, entorpecen las explicaciones y dominan el ambiente de la clase, sobre todo si superan en edad a sus compañeros por ser repetidores. Su concentración en los grupos no bilingües convierte algunas horas en auténticos calvarios para sus compañeros y para los profesores responsables.
El no tener contra ellos más argumento que el de las palabras que no quieren escuchar, el aceptar diariamente que se sienten ante nosotros exhibiendo su enfrentamiento radical con el sistema es para mí el aspecto más negativo de todos los que afectan a nuestra enseñanza pública. Con su actuación no sólo impiden que se cree el necesario ambiente de trabajo o de atención, sino que, además, provocan tensiones que siembran de peligros las relaciones personales en los centros. La supervivencia de los desertores y su incremento es la muestra viva de que aquí se puede estar sin hacer nada y que se puede, hasta cierto punto, molestar a los demás, sin sufrir efectos disciplinarios notables. Su efecto ambiental es muchas veces lamentable y con frecuencia demoledor.
Contra ellos se podrían hacer miles de cosas, pero antes es necesario convencernos y convencer al conjunto social de la veracidad del diagnóstico, de que los desertores existen, de que florecen y se multiplican en la ESO y de que tolerar su presencia es el origen de un problema que se extiende a todo lo demás. Es necesario repetirlo muchas veces. Tenemos un gran problema: Cómo evitar que los desertores sigan destruyendo nuestro sistema de enseñanza.